Si tienes previsto no utilizar el equipo de aire acondicionado durante un periodo prolongado, por ejemplo en los meses de primavera u otoño, sigue los consejos de esta guía. Conseguirás que la unidad vuelva a funcionar perfectamente cuando la necesites de nuevo.
1. Realiza una limpieza del filtro de aire de la unidad interior. Sigue esta guía. La limpieza de la unidad exterior debe realizarla un profesional autorizado, pero no es necesaria hacerla frecuentemente pues los equipos están preparados para las inclemencias del tiempo y son resistentes.
2. Selecciona el modo de funcionamiento ventilador y deja funcionando la unidad durante 20 o 30 minutos. En algunos modelos puedes utilizar el modo auto-limpieza incorporado. Esto secará completamente los componentes internos evitando el crecimiento de hongos o mohos.
3. Apaga la unidad y desconecta totalmente la alimentación del equipo, tanto de la unidad exterior como de la interior. Normalmente, en tu instalación tendrás un interruptor en el cuadro eléctrico de la vivienda para ello.
4. Retira las baterías o pilas del mando a distancia.
1. Revisa el cableado de la instalación, que no haya sufrido cortes o desconexiones. Revisa las tuberías que van a la unidad exterior y da un vistazo al ventilador, que no haya residuos sobre el mismo y que la unidad esté en buen estado.
2. Conecta la alimentación de los equipos (interruptor del cuadro eléctrico de tu hogar) y coloca las pilas o baterías en el mando a distancia. Selecciona el modo de funcionamiento ventilador y deja funcionando la unidad durante 20 o 30 minutos. En algunos modelos puedes utilizar el modo auto-limpieza incorporado.
3. Realiza una limpieza del filtro de aire de la unidad interior. Sigue esta guía. La limpieza de la unidad exterior debe realizarla un profesional autorizado, pero no es necesaria hacerla frecuentemente pues los equipos están preparados para las inclemencias del tiempo y son resistentes.
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